Trascendencia es una palabra que utilizamos a menudo en esta página, pero parece que poca gente ha entendido su verdadero significado. Para clarificar nuestra definición de trascendencia tenemos que explicar antes la esencia de la filosofía de ANUS; cómo llegó a ser lo que es y cómo se desarrolló a lo largo del tiempo. Comenzaremos definiendo los dos principales movimientos filosóficos del pensamiento occidental: empirismo y racionalismo.

El racionalismo es el sistema que adoptaron pensadores como Platón, Leibniz, Spinoza y Descartes: postula que podemos adquirir conocimiento del mundo por medio del pensamiento exclusivamente, sin recurrir a la experiencia. El empirismo, que fue una respuesta al racionalismo, fue desarrollado en gran parte por filósofos de la escuela británica como Locke, Berkeley y Hume; afirmaba que nuestro conocimiento proviene de la experiencia. Los racionalistas radicales sugerían evitar las emociones y centrarse en el pensamiento racional; los empiristas radicales afirmaban que no existe una verdad objetiva racional y que todo es, por tanto, simplemente experiencia subjetiva.

La persona que acabó con este conflicto fue Emmanuel Kant. De formación racionalista pero influido por el empirista escéptico David Hume, Kant se dio cuenta de que ambas escuelas presentaban problemas. Los racionalistas tenían razón al postular que podemos formarnos un juicio sobre ciertos aspectos del mundo sin necesidad de experimentarlos, pero los empiristas por su parte acertaban al afirmar que la verdad absoluta parece injustificada y que necesitamos experimentar algo sobre lo que construir cualquier conocimiento adicional. Lo que siguió a continuación fue la conocida como "Revolución Copernicana": Kant pasó de centrarse en los objetos de nuestro conocimiento a estudiar cómo funciona nuestra facultad cognitiva. El resultado fue el asombroso sistema filosófico que cambió por completo la filosofía occidental: el idealismo trascendental.

El idealismo trascendental es una síntesis de racionalismo y empirismo. Al comienzo de su Crítica de la Razón Pura, Kant sugiere lo siguiente:

"No puede haber duda de que todo nuestro conocimiento comienza con la experiencia... Pero de esto no se sigue que todo nuestro conocimiento surja de la experiencia"

En otras palabras: dependemos de la experiencia para saber cualquier cosa, pero nuestro consciente es capaz de razonar y alcanzar conclusiones lógicas que no son necesariamente dependientes de una experiencia correlativa. A este conocimiento lo llamamos a priori; aquello que conocemos independientemente de la experiencia sensorial. Lo opuesto es aquello que los empiristas británicos siempre enfatizaron, a posteriori, que es el conocimiento adquirido a través de la experiencia de los sentidos. Kant nunca abandonó su racionalismo, pero señaló las limitaciones de la facultades humanas y afirmó que el mundó consta de dos realidades: nuestro mundo fenoménico y el mundo objetivo o de las cosas en sí, como él las llamó.

La idea básica es como sigue: no podemos saber nada de las cosas en sí porque esto conlleva ir más allá de nuestras facultades humanas. Lo que experimentamos son fenómenos o impresiones de las cosas en sí. Así, todo nuestro conocimiento está confinado dentro de un área puramente subjetiva de pensamiento. Al mismo tiempo nos movemos dentro de un espacio objetivo, que compartimos todos. Percibimos la realidad de forma similar y nacemos con un consciente que interpreta, clasifica y estructura nuestras impresiones por medio de un aparato racional común. S.R. Prozak lo explica de esta manera:

"La derivación de la verdad y la obtención de los objetivos en el lenguaje de la verdad es un proceso consistente en la unión de mente y cuerpo, un proceso que trasciende la división sujeto/objeto. Estas percepciones no son objetivas ya que no crean un fin en el individuo, pero son estimuladas por el espacio objetivo y se actúa en torno a ellas también en el espacio objetivo" (Amor y Nihilismo: Un Manual Integralista).

El idealismo trascendental es una búsqueda que tiene como fin entender cómo obtener este conocimiento. Los filósofos post-Kantianos como Hegel, Schopenhauer y Nietzsche fueron un paso más allá y se distanciaron de gran parte del racionalismo inherente a la filosofía de Kant. Nietzsche por ejemplo eliminó por completo las cosas en sí y sugirió que podrían no existir siquiera. Lo que siguió a continuación fue un fuerte idealismo empirista: no debemos preocuparnos en absoluto por encontrar la "verdad", todo lo que importa es nuestro mundo fenoménico y lo que encontremos estéticamente atractivo dentro de éste.

Mientras que Kant afirma que el deber ético es el principio más elevado del hombre, Schopenhauer y Nietzsche lo suprimieron y señalaron la falsedad que subyace en gran parte de la moralidad. En su lugar defendieron un concepto más existencial denominado Voluntad, que es una forma de conflicto interno y metafísico que busca comprender el mundo a través del poder intenso y la conquista sacrificada. Este es el idealismo germano al que ANUS se adhiere, aunque reconocemos y afirmamos el núcleo del idealismo trascendental de Kant: experimentamos el mundo a través de impresiones subjetivas que estructuramos de forma inherente a nuestro consciente cognitivo.

¿Cómo encaja en todo esto el nihilismo? El nihilismo tal y como nosotros lo usamos es un método con el que apartamos todas las impresiones-basura e intentamos observar el fenómeno tal y como se representa en nuestro consciente. Kant tuvo una idea similar a la que denominó estética trascendental: cuando percibimos algo debemos suprimir toda conceptualización y aislar la impresión sensorial para que sólo nos quede el conocimiento empírico. Después eliminamos el conocimiento sensorial y estudiamos la forma de aquello que hemos aprehendido. El nihilismo para nosotros funciona de forma similar: dejar a un lado las emociones engañosas, todos los conceptos morales y los principios éticos: ¿qué queda? Pura forma y estructura. Esto es lo más cerca que puedes llegar a "objetivizar" las cosas en sí.

La trascendencia es el proceso en el que unimos nuestro consciente con el espacio objetivo en el que éste existe y trascendemos sus límites conceptuales. Aclaración: esto NO quiere decir que accedamos en ningún momento a la propia realidad objetiva. Esto es imposible. Lo que podemos hacer es entender el mundo de los fenómenos evitando proyectar en este mundo más cosas de las que ya proyectamos por defecto. Aquí es donde los kantianos y los nietzscheanos difieren: aquéllos afirman que podemos alcanzar la trascendencia por medio de la razón, mientras que los nietzscheanos consideran esto totalmente irrelevante y en su lugar alaban la experiencia subjetiva por lo que es: experiencia, voluntad de poder.

En ANUS, aunque somos esencialmente nietzscheanos, nos interesa mayormente la estructura básica de estas creencias filosóficas: nuestra mente y el espacio objetivo común en el que ésta existe comparten una función común. Las diferentes escuelas idealistas e incluso los racionalistas como Platón discutirían en detalle de qué se compone nuestro mundo exactamente y cómo ordenamos las percepciones, pero ANUS intenta ver la unidad en lo que esos filósofos intentan decir. La razón para esto es que nosotros afirmamos que en última instancia no importa cómo nos relacionemos con el mundo ya que, citando de nuevo a S.R. Prozak, "sus operaciones [las del mundo, n del t] se pueden medir y predecir sin conocer su composición."

La gente que pretende que la trascendencia es una puerta a las cosas en sí se engaña a sí misma, y son libres de pasar el resto de sus vidas tratando de probar una imposibilidad. Lo bello y valiente de filósofos como Platón, Kant o Nietzsche es que apartaron nuestra atención de la obsesión por los objetos y en su lugar nos instaron a estudiar cómo se perciben estos objetos de forma realista. Todos ellos llegaron aproximadamente a la misma conclusión: hay que estudiar las formas (Platón), fenómenos (Kant) y estética (Nietzsche). La verdad objetiva está más allá de nosotros, pero la verdad como aprehensión de nuestro espacio objetivo común es lo que buscamos. Ésta es la verdadera trascendencia.

February 17, 2008

Our gratitude to "Shanti Andía" for this translation.